Yoga para la discapacidad

En este blog que habla sobre yoga tenemos post dedicados a sus aspectos teóricos, los dedicados a intentar expresar como sería la mirada de un yogui sobre nuestra sociedad, y también otros más íntimos y líricos, la única expresión posible para comunicar el sabor interior que el yoga va dejando en nosotros. Hoy vamos a inaugurar una nueva sección dedicada a la actualidad del yoga en el mundo.

En ella comentaremos noticias referidas al yoga que nos parezcan interesantes por el motivo que sea: por la novedad; por su interés informativo sobre la evolución del yoga en nuestros días; por su interés científico, o por la oportunidad que nos ofrezca para denunciar y comentar el montaje consumista y el interés comercial que se está formando en torno al mundo del yoga.

Por tanto, en el lado derecho de la portada del blog, encima del enlace a nuestro centro de yoga habrá un hipervínculo titulado “Actualidad del yoga” que nos dirigirá a todas estas noticias que queremos comentar.

Hoy inauguramos la sección con un video americano de un veterano soldado de la Guerra del Golfo discapacitado, que recobra el movimiento y la ilusión gracias al yoga, la voluntad y la fe.


¡Qué impresionante, verdad? Y qué aspecto más encantador tiene nuestro veterano. Qué fe, qué voluntad, cuando poco antes estaba deprimido, gordo e inútil, tirado en un sillón con una lata de cerveza. Alguien confía en él y él le da una oportunidad al yoga.

El yoga hace el milagro.

Este entrañable veterano, bajito, impedido y denso nos fascina y nos enternece. Parece Forrest Gump cuando hecha a correr como un conejo y le estallan los aparatos que sujetan sus piernas paralíticas. Es difícil de creer. A veces parece un anuncio de un centro de yoga que lo utiliza como panacea para hacer negocio. Y por otra parte es tan real, tan verdadera su figura de inválido, su cara de resignación depresiva y su bondad, tan auténtico su esfuerzo y tan aparentemente verídicas sus caídas y sus levantadas, que uno no sabe que pensar…

¿Será posible que el yoga haga estos milagros? ¿O será este video uno más del perfecto marketing de los americanos? No lo sé, lo que si puedo decir es que a mí el yoga me cambió la vida hace ya muchos años, que tengo secuelas de una poliomielitis que sufrí de pequeño, y que reconozco sus caídas en las mías cuando aprendí a practicar yoga.

Yo también confié en el yoga con una fe inconmovible y un poco desesperada. Yo también adelgacé 20 kilos que nunca volví a recuperar. Y aunque no corro como un conejo ni me he olvidado de las secuelas de la polio, he podido controlar sus devastadores efectos y sentirme sano a pesar de ellos. 28 años más tarde de haber empezado a practicar yoga estoy mucho mejor físicamente que 28 años antes, y he ganado tanto en determinación, vitalidad psicológica y salud que, como este veterano soldado, digo:

Sí, se puede.

2 comentarios:

  1. Gracias Yogui por este doble testimonio. El del veterano (que es cierto que parece publicidad seguramente porque tiene una calidad poco usual para vídeo casero), y sobretodo, el tuyo, que los que te conocemos sabemos que es real y además a mí me parece que es la mejor ilustración para hacer entender hasta dónde llegan los caminos del Yoga. Enhorabuena por la entrada.

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  2. El yoga es fantástico. El yogui Gandhi que, aunque nunca practicó una asana, era un gran yogui, iba en volandas por los caminos de la India en sus protestas pacíficas.
    El yoga enseña a caminar, en muchos sentidos.
    Gracias, Julia, por tu felicitación. Me alegra "oírte" por aquí y verte en el sello de correos del comentario.
    Un abrazo.

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